Israel, Irán y Estados Unidos se instalaron como los tres actores centrales para la atención mediática internacional en la última semana. La cobertura inició con el ataque israelí a instalaciones nucleares y militares en Irán el 13 de junio, con el objetivo de frenar el avance del programa nuclear de Teherán.
EEUU se sumó al conflicto el 21 de junio, con una ofensiva a tres centros nucleares iraníes. Incluía la planta subterránea de enriquecimiento de uranio de Fordow, clave para el programa iraní. Días después, el 23 de junio, EEUU fue contraatacado en sus bases militares en Catar.
Aunque el 23 de junio Trump declaró el fin de lo que denominó “la guerra de los 12 días”, el conflicto determinó, nuevamente, cómo se componen las alianzas internacionales. A la espalda de Trump, con apoyo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se ubicó la Unión Europea —impotente, ceñida a pedir el cese del conflicto—, y la OTAN —que incluso felicitó al presidente estadounidense por su “decisiva acción” en el territorio—. Del otro lado, Irán fue respaldado por Rusia y China.
Pero, ¿cómo se posicionaron los países latinoamericanos ante este conflicto?
Del lado de Israel
Aunque no hubo un comunicado oficial, el presidente argentino, Javier Milei, expresó su posición de forma explícita. “Irán es un enemigo de Argentina”, declaró el viernes pasado, en una entrevista con el canal LN+, horas antes del involucramiento estadounidense. Además, subrayó su alineamiento incondicional con Israel —que Irán busca “hacer desaparecer”— y llamó “queridísimo amigo” Netanyahu. En esa línea, Milei reposteó mensajes de Trump y Netanyahu, avalando la acción militar y la doctrina de “paz a través de la fuerza”. En tanto, la oposición argentina reclamó que el presidente no puede catalogar de “enemigo” a Irán sin el pronunciamiento del Congreso.
Los atentados a la embajada de Israel (1992) y a la Asociación Mutual Israelita Argentina, conocida como AMIA (1994), son antecedentes que pesan en el posicionamiento del país. Investigaciones judiciales argentinas vinculan los atentados a Hezbolá e Irán, lo que consolidó un vínculo estratégico entre el gobierno argentino e israelí en seguridad y lucha contra el terrorismo.
Paraguay también respaldó abiertamente a Israel en un comunicado de la Cancillería en el que reafirmó su derecho a la autodefensa. “Paraguay ratifica su apoyo al pueblo de Israel y al derecho de proteger su existencia. Acompañamos las acciones llevadas adelante por los países aliados”, expresa el texto. Asimismo, condenó “enérgicamente” el ataque iraní contra la base militar Al-Udeid en Catar y llamó a buscar “una salida diplomática” al conflicto.
Por su parte, Ecuador y El Salvador, con gobiernos alineados ideológicamente con la línea política de Trump, no emitieron declaraciones oficiales hasta el momento. Un dato coyuntural: el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, estuvo en China en el Foro Davos de Verano —apenas dos días después de que se declarase el fin de la guerra— en busca de nuevas inversiones.
Llamado a la paz
En México, la Secretaría de Relaciones Exteriores llamó al “diálogo diplomático por la paz entre las partes” y reiteró la “convicción pacifista” del país. Por su parte, la presidenta, Claudia Sheinbaum, escribió en X que “México será siempre factor de paz” y citó al papa Francisco: “La guerra es el mayor fracaso de la humanidad. No hay futuro en la destrucción sino en la fraternidad. La paz no es solo ausencia de guerra es la construcción de la justicia”.
Sin aseveraciones tajantes en contra o a favor de Irán o Israel, Uruguay, Colombia y Perú transmitieron su preocupación, llamaron a buscar una resolución diplomática del conflicto y a establecer la paz. El presidente uruguayo, Yamandú Orsi, incluso describió que el país mantiene una “posición de neutralidad”. Matizando el tono del comunicado oficial, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, adoptó una postura más enfática. Durante un acto público, sostuvo que Irán no desarrolla armas nucleares, sino un programa con fines pacíficos.
Condenas a EEUU
Luego de que EEUU se involucrara en el conflicto, el presidente chileno, Gabriel Boric, expresó su repudio hacia la ofensiva en su cuenta personal de X. “Chile condena este ataque de EEUU”, escribió. “Tener poder no autoriza a utilizarlo vulnerando las reglas que como humanidad nos hemos dado. Aunque seas Estados Unidos”, agrega el mensaje del presidente. Además, la Cancillería chilena publicó un comunicado el mismo día reafirmando la condena.
Bolivia se sumó a las condenas a EEUU mediante un mensaje en X del presidente, Luis Arce. ”Bombardear objetivos de esta naturaleza no solo pone en riesgo la paz regional y global, sino que vulnera principios fundamentales del Derecho Internacional y la Carta de la ONU”, expresó.
Con una apoyo más claro hacia el régimen de los atayolás, Brasil calificó las ofensivas como una “violación de la soberanía de Irán y una transgresión al derecho internacional” mediante un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores. Se alude específicamente a las normas de la Carta de la ONU y de la Agencia Internacional de Energía Atómica. Además, el país reafirmó su postura mediante un comunicado conjunto de los BRICS, presidido en este momento por Brasil. El bloque expresó una “profunda preocupación por los ataques militares contra la República Islámica” y llamó a una resolución diplomática.
Del lado de Irán
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, condenó “enérgicamente” los bombardeos estadounidenses. Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano denuncia la “cobarde agresión” y agrega: “Hay que detener la agresión de Estados Unidos contra Irán (…), alentada por el Gobierno genocida de Israel”. “Con este irresponsable paso, Estados Unidos secuestra de manera temeraria la búsqueda de la paz regional y arrastra a la humanidad a una crisis de incalculables consecuencias”, prosigue.
Desde el inicio del conflicto, en una serie de comunicados del Ministerio de Relaciones Exteriores, el régimen venezolano expresó su “solidaridad con el pueblo iraní”. Además de respaldar “las acciones adoptadas por la República Islámica” para defenderse, el ministerio agregó que “respalda los pronunciamientos de la República Popular de China y la Federación de Rusia”.
El régimen nicaragüense emitió un comunicado en el que calificó la agresión de Israel como una “temeraria agresión” y un “cobarde ataque”. “Nuestra invariable solidaridad con el líder supremo de la revolución islámica de Irán, ayatolá Ali Jamaneí y el presidente Masoud Pezeshkian, con el pueblo iraní”, agregó el mensaje del líder sandinista.