Perú en la recta final: voto fragmentado y ausencia de liderazgo

Perú en la recta final: voto fragmentado y ausencia de liderazgo

El próximo domingo tendrá lugar la primera vuelta de la elección en Perú. El resultado es incierto y posiblemente no surjan claros ganadores. La gobernabilidad del país no será fácil.

Por: Alejandra Puente8 Abr, 2021
Lectura: 6 min.
Perú en la recta final: voto fragmentado y ausencia de liderazgo
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Artículo original en español. Traducción realizada por inteligencia artificial.

Este domingo 11 de abril aproximadamente 25 millones de personas elegirán a los partidos que conformarán el Congreso de la República y a las dos propuestas presidenciales que pasarán a la segunda vuelta de las elecciones generales del Perú. Debido a que la ley electoral prohíbe publicar encuestas la semana de las elecciones, solo sabemos lo que reveló el último simulacro de votación publicado el 4 de abril (IPSOS): nada está definido.

Son nada menos que seis los candidatos que encabezan los sondeos, con cifras demasiado ajustadas y cambiantes como para poder dar un favorito. De esos seis, hay tres que los gremios empresariales consideran como de derecha y tres de izquierda. Todos con altas posibilidades de pasar a la segunda vuelta. Será finalmente el 5 de junio, en una votación entre los dos punteros que se decidirá quién gobernará el país.

Voto fragmentado

Es difícil hacer pronósticos. Lo que sí sabemos es que la polarización va en aumento a medida que los candidatos de derecha e izquierda tratan —con promesas, pullas y ataques— de quitarse votos entre sí. Todo apunta que el electorado finalmente, sin favoritos, se decidirá días antes de la elección por el candidato que considere que mejor representa alguno de los dos espectros.

En el escenario de derecha, cuatro candidatos se pelean el bolsón de votos de la defensa del modelo económico y la empresa privada. Con altas posibilidades tenemos a la candidata de Fuerza Popular, Keiko Fujimori. Como estrategia en la recta final, ella ha elegido apelar al voto duro del fujimorismo ofreciendo indultar y liberar a su padre, el expresidente Alberto Fujimori preso por diversos delitos. Sin embargo, según las encuestas en todos los escenarios de segunda vuelta terminaría derrotada.

Panorama en la derecha

A Fujimori le hace la pelea Hernando de Soto, de Avanza País, un economista y político que vio un ascenso en las preferencias en la última semana pero que no ha sabido consolidarlo con un discurso conciliador. Recientemente, no ha dado buenas entrevistas a nivel local e internacional. Por ejemplo, el periodista Fernando Del Rincón, de CNN en Español, le reclamó ser «poco transparente» cuando no quiso responder en qué estado de los Estados Unidos se había vacunado.

Dentro de la derecha, también cuenta con posibilidades Rafael López Aliaga quien postula por el partido Renovación Popular, con la bandera del empresario exitoso que puede hacer lo mismo por el país. Él ha sido el centro de ataques y críticas de todos los bandos, por sus posturas conservadoras y algunas posiciones poco atinadas en torno a temas como el suicidio, la eutanasia, el aborto y la comunidad LGTB. Justifica muchos de estos comentarios por sus inclinaciones religiosas; admitió, por ejemplo, que está «enamorado» de la Virgen María y utiliza como penitencia un cilicio, accesorio utilizado para provocar deliberadamente dolor.

Veolución de otros candidatos

En el otro espectro tenemos al candidato de Acción Popular, Yonhy Lescano, parlamentario del Congreso disuelto por el expresidente Martín Vizcarra en 2019. Capitalizó votos rápidamente, deslindándose de sus correligionarios que vacaron a Vizcarra en noviembre del 2020, menos de un año después de haber sido electos al Congreso interino. Su postura más bien ha sido catalogada de centroizquierda, principalmente por oponerse al sistema privado de pensiones (AFP), por lo que ha perdido algunos votos en localidades que tienden a votar en contra del sistema. Lescano se ha mantenido favorito en las encuestas, aunque con una tendencia en las últimas semanas a la baja, y es el único que un escenario de segunda vuelta les ganaría a todos los otros candidatos.

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Verónika Mendoza, de Juntos por el Perú, es una de esas candidatas que pelea el mismo espacio electoral que Yonhy Lescano y que logró algo de momento cuando tuvo buenos desempeños en presentaciones públicas. Ella y Keiko Fujimori son consideras las candidatas más solventes y con más experiencia en elecciones. Sus propuestas bandera son el cambio de la Constitución, con especial énfasis en el capítulo económico, reformas sociales para la redistribución de la riqueza y cambios en el Banco Central de Reserva del Perú, un tema sensible entre quienes no quieren cambios en el modelo económico.

Escenario de incertidumbre

Sin embargo, esta última semana podría mostrar una vuelta de timón y avecinarse un posible outsider desde la izquierda, que podría cerrarle el paso a los dos candidatos anteriores. Pedro Castillo, de Perú Libre, un dirigente del gremio conservador de profesores en Cajamarca, está dispersando el voto del sur del país. Él propone también un cambio de Constitución y desactivar el Tribunal Constitucional por encontrarse en desacuerdo con sus recientes fallos. Recordemos que el TC ha declarado inconstitucionales varias leyes aprobadas en el Congreso interino, principalmente porque implicaban iniciativa de gasto. A diferencia de Mendoza, Castillo es más conservador e incluso ha expresado que está en contra del enfoque de género en la educación escolar.

Una causa directa de este escenario de incertidumbre es la ausencia de liderazgo de los partidos políticos, lo que ha llevado a una multiplicidad de candidatos en la oferta, que supera toda capacidad de análisis para el elector. En total, hay en contienda 18 fórmulas de presidente y vicepresidentes, en su mayoría conformadas por políticos desconocidos o que postulan a la Presidencia por primera vez. En su mayoría son invitados por partidos políticos que deben superar el 5 % de los votos al Congreso para mantener su inscripción, según una última modificación a la Ley Electoral.

Los peligros que vienen

Esto no solo es un problema para la elección presidencial, sino también para la elección congresal. Se avizora un Congreso nuevamente fragmentado, con cerca de una decena de bancadas, sin una clara mayoría y que podrían propiciar escenarios de inestabilidad. En los últimos cinco años, el Perú ha tenido cuatro presidentes. En una elección donde no se vislumbra capacidad para llegar a consensos entre sectores, es altamente probable que se repitan los escenarios de enfrentamiento que generaron esa inestabilidad.

A esto hay que sumarle que seis de los siete magistrados del Tribunal Constitucional cuentan con mandato vencido. Este organismo es el que decide sobre discrepancias jurisdiccionales entre el Ejecutivo y el Legislativo. Es decir, el Congreso entrante será el encargado de elegir sus reemplazos. En los últimos años, el TC ha fallado predominantemente a favor de la postura del Ejecutivo en diversos temas; sin embargo, esa tendencia podría no sostenerse en el siguiente Congreso.

Hay que ajustarse bien el cinturón de seguridad, porque se vienen años muy complicados para la gobernabilidad en el Perú, en plena celebración de su Bicentenario.

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Alejandra Puente

Alejandra Puente

Periodista. Conductora de "Peruanos al Bicentenario" en TV Perú

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