¿Cuán importante es Latinoamérica para la OTAN?

¿Cuán importante es Latinoamérica para la OTAN?

Colombia es el único socio latinoamericano de la OTAN. Esta experiencia muestra que la región puede ser un aliado clave en el bloque atlántico y que existen posibilidades de intercambio en defensa ante amenazas como el crimen organizado y la ciberseguridad.

Por: Andrea Valdelamar10 Abr, 2025
Lectura: 5 min.
¿Cuán importante es Latinoamérica para la OTAN?
Compartir
Artículo original en español. Traducción realizada por inteligencia artificial.

Aunque la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) está compuesta principalmente por países de Europa y América del Norte, en 2017 Colombia se convirtió en el primer y único socio global latinoamericano. Esta relación tiene profundas implicaciones para la seguridad y la estabilidad regional en América Latina. Al mismo tiempo refleja la creciente interconexión entre la seguridad global y las dinámicas estratégicas regionales.

¿Por qué Colombia se ha convertido en un actor clave para la OTAN y qué valor tiene esto para Latinoamérica? Analizaremos el contexto de seguridad regional y los beneficios estratégicos mutuos de esta relación.

Una relación estratégica única

El estatus de socio global de la OTAN le permite a Colombia cooperar en áreas clave. Algunas son: seguridad cibernética, lucha contra el narcotráfico, defensa de la democracia y operaciones de paz. La relación ha evolucionado desde un enfoque inicial, centrado en la seguridad interna, hacia una cooperación más amplia en temas de estabilidad regional y amenazas transnacionales. La designación de la Embajada de Alemania en Bogotá como punto de contacto de la OTAN, facilita el diálogo estratégico y la coordinación operativa.

La relación también ha permitido a Colombia acceder a entrenamiento, tecnología y asistencia técnica en materia de defensa. Esto consolida su capacidad para enfrentar desafíos de seguridad. Además, Colombia ha compartido su experiencia en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico. Contribuye así a las capacidades de la OTAN en el manejo de conflictos asimétricos.

Seguridad en América Latina

Latinoamérica enfrenta una combinación compleja de desafíos de seguridad, incluyendo crimen organizado transnacional, narcotráfico, tráfico de armas, inestabilidad política y amenazas cibernéticas. Según el Informe de Riesgo Político 2025, la región concentra el 33% de los homicidios mundiales a pesar de representar solo el 8% de la población global​. Colombia es uno de los países con mayor experiencia en combate al crimen organizado y gestión de conflictos internos. Se ha convertido en un actor clave para la estabilidad regional.

La cooperación con la OTAN posiciona a Colombia como un nodo estratégico. Por ejemplo, para enfrentar amenazas regionales como el tráfico de drogas, el terrorismo y la migración forzada. Esta relación fortalece la capacidad de Colombia para responder a desafíos externos y regionales mediante un esquema efectivo de disuasión y contención. Además, las crecientes tensiones geopolíticas y la influencia de actores como China, Rusia e Irán subrayan la importancia de contar con una estructura de seguridad consolidada que permita una respuesta rápida, coordinada y adaptable ante amenazas emergentes.

Beneficios estratégicos

Colombia es un socio estratégico en una región que tradicionalmente ha estado fuera del radio de acción de la alianza atlántica. Esta experiencia ofrece lecciones valiosas para las operaciones de la OTAN en otros contextos. Asimismo, su estabilidad y capacidad militar refuerzan la presencia de la OTAN en una región donde la competencia por la influencia política y económica se ha intensificado en los últimos años.

El acceso geoestratégico que proporcionan las costas colombianas en el Atlántico y el Pacífico facilita la movilidad operativa y la proyección de fuerza de la OTAN en escenarios de conflicto o crisis humanitaria. Además, la cooperación en ciberseguridad y la formación de capacidades en inteligencia fortalecen la preparación de la alianza para enfrentar amenazas híbridas y tecnológicas emergentes.

Colombia ha entrenado a más de 16.000 militares y policías de otros países en temas como desminado y lucha contra el narcotráfico (cifra estimada hasta 2023).

USD 1,5 millones: Valor estimado del apoyo logístico y de entrenamiento brindado por Colombia a otras naciones en el marco de su cooperación con OTAN y otras alianzas (estimaciones de defensa no oficiales).

Colombia cuenta con aproximadamente 7.000 militares especializados en operaciones de desminado, muchos de ellos entrenados bajo estándares OTAN.

La OTAN ha apoyado a Colombia en más de 20 actividades de cooperación (seminarios, ejercicios, capacitaciones) desde que se formalizó el vínculo.

A través de programas de entrenamiento, ejercicios conjuntos y asistencia técnica, Colombia ha facilitado el fortalecimiento de las fuerzas de seguridad de otros países de la región. Esto contribuye a una respuesta más coordinada frente a amenazas compartidas y promueve la estabilidad política y social en la región.

Este modelo de cooperación sirve como referencia para otros países latinoamericanos interesados en establecer acuerdos similares. La región ha mantenido históricamente una postura de no alineación. De todos modos, la creciente presión de actores externos, los cambios geopolíticos y las dinámicas regionales de seguridad podrían incentivar una mayor colaboración en defensa bajo el paraguas de la OTAN.

Perspectivas y desafíos futuros

De cara al futuro, la relación entre Colombia y la OTAN enfrenta tanto oportunidades como desafíos. La creciente competencia entre Estados Unidos y China por la influencia en América Latina podría tensar la posición estratégica de Colombia en la región. Sin embargo, la cooperación en defensa con la OTAN proporciona una plataforma para que el país consolide un liderazgo regional y refuerce su capacidad de respuesta ante crisis de seguridad y estabilidad.

Asimismo, el fortalecimiento de las capacidades de defensa regional mediante la cooperación con la OTAN puede incentivar una mayor integración entre los países latinoamericanos en temas de seguridad y defensa. La creación de espacios multilaterales para enfrentar el crimen organizado, las amenazas cibernéticas y las crisis migratorias presenta una oportunidad para abordar varios de los principales riesgos que tiene la región.

La relación entre Colombia y la OTAN representa un hito estratégico para la seguridad y la estabilidad en América Latina. Colombia ha demostrado ser un socio confiable y capaz, aportando experiencia operativa y una posición geopolítica clave para la alianza atlántica. A medida que las dinámicas de seguridad global y regional continúan evolucionando, esta asociación ofrece una plataforma para fortalecer la defensa colectiva y promover la estabilidad.

Andrea Valdelamar

Andrea Valdelamar

Magíster en seguridad y defensa nacional de la Escuela Superior de Guerra y politóloga de la Pontificia Universidad Javeriana. Egresada del Curso Integral de Defensa Nacional. Actualmente es coordinadora de proyectos en la Fundación Konrad Adenauer en Colombia. Es fundadora de ATHENA, red de mujeres en seguridad y defensa impulsada.

newsletter_logo

Únete a nuestro newsletter