El presidente Fernández se adueña de la derrota y teme por su gobernabilidad

El presidente Fernández se adueña de la derrota y teme por su gobernabilidad

En las primarias, el Frente de Todos cayó en la mayoría de los distritos del país. La gestión de la pandemia, un escándalo ético y la crisis económica pasaron factura al mandatario. La oposición de Juntos por el Cambio resurge como alternativa, si se repiten estos resultados en noviembre.

Por: Martín Torino14 Sep, 2021
Lectura: 5 min.
El presidente Fernández se adueña de la derrota y teme por su gobernabilidad
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Artículo original en español. Traducción realizada por inteligencia artificial.

El presidente Alberto Fernández subió al escenario este domingo 12 de septiembre a las 23:33 horas no solo para hacerse cargo de una dura derrota en las elecciones primarias, sino también para pedir ayuda. El mandatario quiso plebiscitar su gestión, postuló a los principales candidatos, y le fue muy mal: el peronismo-kirchnerismo perdió en 17 de las 24 provincias. Si los resultados de las primarias se repiten en las elecciones del 14 de noviembre, el Frente de Todos no controlará ninguna cámara del Congreso. Además, la autoridad de Alberto Fernández quedaría débil frente a una vicepresidenta con poder como Cristina Fernández de Kirchner, y frente a una mayoría de la sociedad que se estaría volcando por opciones más liberales y conservadoras.

La sorpresa de la jornada fue la caída del oficialismo en el distrito con más habitantes del país, la provincia de Buenos Aires. Allí el peronismo-kirchnerismo aspiraba a sacar cuatro puntos de ventaja, tal como publicó en plena veda electoral la agencia estatal de noticias. Pero ocurrió todo lo contrario. La principal fuerza opositora, Juntos por el Cambio, le sacó cinco puntos de ventaja a la lista que diseñó el mandatario y que sólo cosechó el voto duro del kirchnerismo (33,4%). Con esa mochila en sus espaldas, subió Fernández al escenario, hasta pararse entre Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, dos de sus socios mayoritarios en la coalición de gobierno. A diferencia de los últimos actos de campaña, en los que primaba el optimismo, esta vez solo habló el jefe de Estado y se llevó los flashes de la derrota.

En sólo 8 minutos, Fernández intensificó la caída en las primarias hasta el punto de temer por su gobernabilidad: «A cada argentino y a cada argentina que está escuchando, quiero pedirles, que tengo por delante dos años de gobierno. Que no voy a bajar los brazos. Y que necesito de la colaboración de cada argentino y de cada argentina y, humildemente, les pido que me ayuden». Que Alberto Fernández ponga en duda si llega a completar el mandato es una cuestión que no estaba en agenda. En las primarias sólo se eligen los candidatos que competirán en noviembre, pero a su vez se comportan como una encuesta a escala real, que muestra la sintonía con la sociedad. En las elecciones de noviembre, el oficialismo puede mejorar su resultado. Pero pareciera que el mandatario ve un futuro complejo.

Festejo de la alianza opositora Juntos por el Cambio | Foto: @horaciorlarreta

Estos son algunos escenarios que enfrentará Fernández, en las próximas semanas:

  • Aumentarían las diferencias entre los socios del Frente de Todos. La arquitectura de esta coalición es atípica, ya que Alberto Fernández fue postulado presidente por su vice, Cristina Fernández de Kirchner, quien gobernó el país entre 2007 y 2015. Ella lo eligió, ella le transfirió sus votos, y ahora ella tomará distancia de esta derrota. Tal como se vio el domingo sobre el escenario, el presidente quedó como el único responsable del revés electoral. Cristina Fernández de Kirchner esta vez no profirió palabra, a diferencia de los últimos actos en los que protagonizó los discursos más largos. El politólogo Karl Deutsch escribió que una característica de los que tienen poder es que «pueden ignorar los costos de los errores, desplazarlos a otros o aplazarlos». La vicepresidenta pareciera desplazar el traspié electoral a su compañero de fórmula.
  • La recesión económica, la inflación, el alto desempleo y una tasa de pobreza que alcanza al 42 % de la población no tienen solución en el corto plazo. Se da por descontado que el Gobierno buscará emitir pesos para financiar el consumo y llegar a las elecciones de noviembre con mejor clima social. Pero esta medida alejaría al Gobierno de un acuerdo con el FMI por la deuda de USD 44.000 millones que firmó el exmandatario Mauricio Macri (Juntos por el Cambio). Y la emisión para financiar consumo apalancaría aún más la inflación a futuro.
  • Falta de apoyo de la sociedad. Más allá de la crisis económica y social, en el último mes la imagen del presidente cayó debido a un escándalo ético. La filtración de fotos y videos del festejo de cumpleaños de su esposa, cuando regían estrictos toques de queda, indignaron hasta a sus propios votantes. Es posible que este conflicto ético haya impactado en las PASO y dañado la credibilidad que tienen los ciudadanos en el presidente.
  • Una oposición más fuerte. Si se repiten los resultados de las PASO, el espacio de Juntos por el Cambio (que reúne a liberales, conservadores, socialdemócratas, entre otros) podría construir mayorías en el Congreso o al menos bloquear los proyectos del oficialismo. Además, el espacio podría ser competitivo para las elecciones presidenciales de 2023, luego de perder el poder en 2019, tras los malos resultados económicos de Mauricio Macri.

El peronismo-kirchnerismo perdió las elecciones de medio término en 2009. Sin embargo, dos años después, Cristina Fernández de Kirchner logró la reelección con el 54 % de los votos. El problema es que, a diferencia de ese momento, ahora el Gobierno enfrenta restricciones económicas más graves. Además, debe acordar un programa de repago con el FMI, o declararse en default. Y, por último, atraviesa una pandemia que el Gobierno podría haber gestionado mejor. La Argentina sumó más de 113.000 muertos y es uno de los países con mayor tasa de mortalidad por covid-19, cerró las escuelas por un extenso período y dificultó la llegada de vacunas, además de otras medidas discrecionales que afectaron la vida cotidiana de sus ciudadanos. Este último domingo, la sociedad mostró su bronca con el Gobierno. Habrá que ver si el vínculo se recompone en solo dos meses.

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Martín Torino

Martín Torino

Periodista político. Corresponsal en la Casa de Gobierno argentina entre 2016 y 2020. Exredactor de «El Cronista Comercial». Msc Global Politics (Birkbeck, University of London). Actualmente cursa posgrado en Sociología de la Universidad de Bielefeld, Alemania

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